Viaje a la Ruta Gastronómica de Yaracuy en su tercer aniversario

Decidieron unirse y ofrecer una ruta de sabores que sedujera a las visitas para que recorran esta región fértil del país, con mucho que ofrecer pero en la que muchos no se detienen. Investigaron recetas yaracuyanas, sumaron voluntades y muestran su determinación a mostrar lo que ofrecen. Ahora celebran el tercer aniversario de la Ruta Gastronómica de Yaracuy con buenas noticias: ya suman 21 iniciativas que se unen con este propósito, varios de ellos jóvenes emprendedores que apuestan desde sus incipientes proyectos.

¨Queremos que este no sea un estado solo de paso¨, comparte Aura Ovalles, menuda, amable y tenaz, motor esencial de esta Ruta que ahora preside. Hace 26 años se fue a Yaracuy con su esposo Efraín Pérez, tras ser gerente en un banco en Caracas.  Ambos dejaron Caracas hace dos décadas para estrenar nueva vida en ese verdor y levantar la posada Granja Momentos la primera que, cuentan, hubo en Yaracuy. Tras más de dos décadas de empeño, son parte del Circuito de la Excelencia y han sido motor fundamental La Ruta Gastronómica de Yaracuy.

Desde el inicio, otros convencidos de cuatro restaurantes se sumaron a la propuesta: La Sazón de Belkis, El Fuerte, El Tibón y Cántaros—. También la cerveza Yaracuy, a cargo de Andrés Del Cid con sus cuatro tipos de cervezas y la pareja de Valle Naranjo. Al comienzo, formaron su asociación civil. Invitaron al historiador y cocinero Juan Alonso Molina, quien averiguó recetas yaracuyanas para ellos. Consiguieron apoyo de la Corporación de Turismo del estado y desde entonces cada uno de los restaurantes propone algunos platos con recetas o ingredientes de esa región como las naranjas, el maíz o el quinchoncho o el maní.

En el camino se han sumado otras propuestas. Allí ya está el Hotel la Antigua Misión, donde aguarda el admirable parque de la Exótica Flora Tropical, un lugar que merece la visita. También hay propuestas más jóvenes. La pareja de Moreno´s, Yoselin Núñez y Luis Moreno, se suman con las galletas que proponen inspirados en sabores tradicionales.  Allí está Adamar Hansen quien desde Chin Cake Factory propone uno bombones rellenos de coco y un ponqué de zanahorias con macadamias. También las hermanas Yollet y Paola Cardozo desde su pequeño café llamado Petra, en honor a su abuela, donde reciben a las visitas con sus tortas caseras y alternativas como una pizza con pesto de maní de Yaracuy. La casa del golfeado también es parte de la ruta.

Así, las mesas del restaurante de posada Granja Momentos, no sólo sirven sus generosos desayunos criollos. También proponen platos yaracuyanos que han rescatado para esta propuesta: una sopa de quinchonchos, abundantes en la región, que puede tener el gusto además de un embutido artesanal, preservado por varias generaciones de una familia de Yaracuy, la longaniza hecha por Milagros González. Hallacas también de quinchonchos.  Bollos pelones sanfelipeños rellenos de carne de cerdo rescatados del libro de Ramón David León o la falda nirgueña.

En el centro de San Felipe, un pequeño local con nueve mesas encierra desde hace 18 años toda la sazón de Belkis Mikelson, hija de padre alemán y madre trujillana que decidió dedicarse a su pasión por la cocina, aprendió empíricamente y tiene este concurrido local junto a su esposo Oscar Peroza. Allí también ofrece sus cátedras de cocina por donde han pasado, cuenta, 985 alumnos. Los fines de semana, o previa reserva, también propone su menú de la ruta en el que sirve cestas de plátano frito rellenas con chicharronada, sus bollos pelones sanfelipeños rellenos de cerdo y un quesillo de café junto a otro de chocolate que son parte de los 22 tipos de este postre que prepara.

Cada uno de los involucrados ha adoptado sus preparaciones y las incorpora a esta ruta con miras a que los turistas se fijen y detengan en esta región fértil. En el restaurante El Fuerte, apostado junto a un hotel con el mismo bautismo, la abogada Carmen Yubirí Ramírez pone en práctica sus dotes de anfitriona en este espacio que decidió gerenciar cuando le hablaron del proyecto. Allí propone de desayuno su versión de una tostada yaracuyana que muchos conocieron años atrás en San Felipe. La elaboraba Felicidad Martínez con un peculiar concentrado de sabores: es una arepa arepa frita rellena con Diablito, mayonesa, el toque verde de una hoja de lechuga y una rueda de tomate para el balance. Ahora ellos la proponen como alternativa.

En El Tibón, un restaurante de carnes y cocina criolla sirven en el menú unos tequeños con masa de jojoto. Allí, Wilmer Rodríguez, su esposa Iraima y sus hijos  regentan desde hace 12 años un local que han logrado que crezca con un minimarket y eventuales espectáculos. Para la ruta, ellos que ya elaboraban cachapas decidieron apostar por platos con el maíz de la región. ¨No consigo uno mejor¨, asegura Rodríguez.

En la Ruta también se suman Multifruit (Productora de jugos de frutas concentrados), la Asociación Civil Llama Ancestral (que organiza la Feria del buñuelo de Cocorote), El Jardín de Mary en Guama (Café apostado en el jardín de una casa familiar), El Patio de los Gallo (Productores de café y maní), Giro CA (ofrecen empanadas como la de chigüire), Alimentos Viocar (Productores de leche, crema y aceite de coco) y el Restaurante La Churuata del Llanero (que abrirá próximamente). También se suman, a este empuje privado, el apoyo del sector público. Gracias a este trabajo en conjunto las posibles visitas pueden organizar una gustosa agenda de sabores en Yaracuy.

En Instagram: @rutagastronomicayaracuy @posadagranjamomentos @restauranteltibon @lasazondebelkis @cervezayaracuy @elfuertebar.grill @petracafeyaracuy @chincakefactory